El yoga es un sistema de técnicas que nos ayudan a equilibrar el cuerpo, la mente y el espíritu a través de la relajación, ejercicios, posturas, respiración y meditación.
El Yoga posee cuatro áreas de preparación y cuando se realiza un yoga integral también nos estamos ocupando de cuestiones precisas de nuestro estilo de vida tales como el ambiente donde nos movemos, la dieta, el hogar, el trabajo y las relaciones interpersonales. Esta práctica tiene la capacidad de cambiar toda nuestra forma de vida.
El yoga también enseña la importancia del conocimiento y la comprensión de lo que somos, mediante el desarrollo de la sensibilidad a las fuerzas que existen dentro de nosotros mismos y en el entorno que nos rodea. Por lo anterior, no importa en qué etapa del embarazo estemos o el nivel de aptitud física en la que algunas mujeres se encuentran, todas podemos beneficiarnos de las técnicas simple de yoga.
Entrar en contacto con nuestro bebé a través de la relajación, visualización y meditación, de manera temprana en el embarazo, nos ayuda a desarrollar un acercamiento a la vida que crece dentro de nosotras. Estas técnicas también pueden ayudar a resolver traumas del pasado que bloquean la capacidad de muchas mujeres para concebir. Igualmente, las complicaciones del trabajo pueden reducirse en gran medida, además se puede generar un aumento de nuestra flexibilidad, fuerza y ??resistencia, combinado con una capacidad para relajarnos durante la dolorosa experiencia de dar a luz.
El yoga también es muy beneficioso para ayudar a romper hábitos perjudiciales para nuestros bebés, tales como la mala dieta, el tabaquismo, el insomnio y los efectos del estrés cotidiano. Es una magnifica herramienta para traer tranquilidad y frescura a nuestro cuerpo y a nuestro ser.
A través de la práctica del yoga pre-natal se puede aprender a tener un control inmediato de la energía o se puede efectuar un cambio gradual en nuestros patrones de energía constitucional y habitual. También puede mejorar la forma en que la energía de nuestro bebé está funcionando y, efectivamente, se encuentra programada por una transmisión de energía que vas desde el útero hasta el bebé. Podemos aprender a manejar de muchas maneras la energía, a través de posturas de yoga, respiración, relajación y meditación. Estas son las herramientas que se enseñan frecuentemente en clases de yoga pre-natal.
El yoga pre-natal puede traer fabulosas manifestaciones a todo nuestro cuerpo, a nuestro estado de ánimo, o a nuestra mente en un momento determinado. Pensemos sólo en poder tener un parto tranquilo. Ya es un magnifico beneficio por el cual vale la pena tener una buena preparación.