Existen muchos tipos de toses y todas ellas debidos a causas diferentes. Si quieres descubrir cuáles son las más comunes entre los bebés y las mejores soluciones para ponerlas alivio, continua leyendo.
¿Qué es la tos?
La tos no es una enfermedad, simplemente es un síntoma que nos indica que algo está sucediendo en el organismo del pequeño que le hace reaccionar ante una anomalía. Gracias a ella las vías respiratorias se limpian de secreciones o de cualquier cuerpo extraño, permitiendo que el aire paso cuando existe una obstrucción en esas vías. Por tanto la tos moviliza la mucosidad en los pulmones y mejora la oxigenación.
Existen varios tipo de toses dependiendo de las causas que las provoca. A continuación te explicamos cómo saber diferenciarlas para que puedas actuar tomando las medidas correctas en cada uno de los casos.
Tos productiva
En este caso el niño comenzará con mocos en la nariz pero bajará irá bajando hasta alcanzar los bronquios y en ese momento es cuando comenzará la tos, ya que el organismo va a tratar de expulsarlos de las vías respiratorias bajas. Este tipo de tos es la más habitual de todas y se reconoce fácilmente porque al toser también se hoy el sonido de los mocos. Otra manera de diferenciarla, es que esta tos normalmente no aparece por las noches.
En cualquier caso si el niño goza de un estado de salud bueno en general, no tiene fiebre y duerme bien, no hará falta hacer nada en especial. Bastará con que esté bien hidratado y poco a poco irá desapareciendo.
Tos seca o irritativa
Suele empezar con dolor de garganta provocado normalmente por una faringitis. Esta irritación es la que lleva al niño a toser y consigue crear un círculo vicioso en el que el pequeño tose porque le pica la garganta y cuanto más tose, más le pica.
Este tipo de tos es la normal en un proceso vírico respiratorio como por ejemplo un resfriado. Es más habitual en verano debido a los ventiladores y aires acondicionados, y se acentúa por la presencia de ciertos agentes irritantes como el humo del tabaco o la contaminación. Esta tos, tampoco suele durar más de dos semanas.
Tos laringea
Esta tos es conocida como «tos perruna» por el sonido que emite, siendo una tos muy habitual en los niños. Su origen suele ser provocado por una infección de tipo vírico que provoca en la laringe una inflamación, pudiéndose quedar incluso afónico el niño de manera pasajera. El tratamiento normal es con ayuda de cortioides orales y es conveniente que se detecte lo antes posible, ya que la laringe es muy estrecha y si se inflama más, puede impedir que el aire pase por ella.
Tos asmática
El asma aparece generalmente en los niños a partir de los tres años de edad, aunque en ocasiones se manifiesta en edades más tempranas. Suele ser difícil de diagnosticar puesto que se puede confundir con otras enfermedades del aparato respiratorio.
Si notas que cuando tu hijo tose parece que está soplando un pito dentro de su pecho, es posible que se deba a un cierre de los bronquios, algo habitual en los procesos asmáticos. En este caso es necesario llevarle cuanto antes al pediatra para iniciar el tratamiento adecuado lo más rápido posible.
