Los tics se presentan en los niños durante sus primeros años de etapa escolar y pueden ser muy leves u controlables o crónicos y que sea necesaria una terapia y manejo medico. Algunos padres se preocupan porque los niños pueden empezar a presentar algún tipo de tics en diversas partes del cuerpo, frecuentemente en su rostro o algunos comportamientos. Los tics son movimientos incontrolados de alguna parte del cuerpo y también se pueden dar en las manos, los hombros o las piernas y aunque a veces puede ser por periodos leves o cortos, también puede llegar a durar por muchos años, incluso mientras se va desarrollando. También se pueden clasificar en simples o complejos.
Los primeros solo utilizan pocos músculos o sonidos que no son tan molestos, pero los segundos si ya tienen que ver con gran parte del cuerpo y producen sonidos y frases extensas y que comprometen su comunicación. Los simples pueden ser los movimientos de los ojos, más muecas faciales, levantamiento de hombros y hasta las sacudidas de cabeza para adelante y atrás o hacia los lados. Los de este tipo se caracterizan porque son muy rápidos y la duración es mínima, de uno a dos segundos. Los que son complejos ya tienen una duración más larga y pueden ser miradas sostenidas, gestos faciales que pueden aparecer muy estables y difícilmente de quitar, morder todo lo que tienen en las manos, golpear lo que tengan en frente o al lado o dar giros sin detenerse y sin razón alguna.
Los tics de tipo sonoro ya son las que incluyen sonidos repetitivos y todo el día, por ejemplo, tratar de limpiar o aclarar la garganta, tener episodios de tos frecuente así este sano o silbar cada momento. También puede tener frases que expresan en cada momento y en conversaciones comunes y a veces el habla puede tener alteraciones como cambios en la voz, alteración en las letras de las palabras, ritmos de habla muy extraños o acentos que no son comunes en un habla. Algunas cosas se pueden manejar con terapias y se desvanecen con el paso de los años pero hay otras que no logran quitarse. Los tics transitorios o leves pueden afectar a un poco más del 10% de los niños en edad escolar. Así como llegan se van y aunque se notan puede parecer que los niños tienen estrés o nerviosismo.
Los tics crónicos si pueden durar muchos años pero no son tan comunes y se presentan en un poco porcentaje, aproximadamente dl 1 al 2%. Los tics pueden aparecer por acusas emocionales y también se hacen acercamientos para poder demostrar que se pueden dar por factores químicos y ambientales pero no hay causas especificas. Influye el desarrollo neurológico y características hereditarias para poder controlarlo o resistirlo y también las formas de educación o crianza sobre todo en la que son recién nacidos o mientras están en el vientre de sus madres. El tratamiento se basa en el uso de medicamentos para hacer un control de los síntomas pero no para erradicarlo, pues ya va de la mano con una terapia de tipo comportamental y de tipo cognitivo.