El Síndrome de Munchausen por poderes (SMP) es definida por los especialistas como una particular forma de maltrato infantil y con una elevada gravedad ya que resulta difícil de diagnosticar como también de manejar a través de un tratamiento posterior. Esta especial forma de maltrato infantil es provocada por un adulto cercano al niño, padre, madre, tíos, que provoca enfermedades a un pequeño que se encuentra bajo su guarda y cuidado.
Se trata de una enfermedad psiquiátrica que en la mayor parte de los casos es protagonizada por la madre que abusa de su hijo provocándole enfermedades o bien fingiendo que el pequeño se encuentra con alguna dolencia.
A pesar de ser un síndrome raro y poco comprendido en cuanto a su causa puede llegar a causar la muerte del niño si no se detecta esta alteración.
Se han podido ver casos en los que la madre simula síntomas de enfermedad en el niño y lo hace a través de diversas formas que logran engañar a los médicos ya que falsifica altas temperaturas, administra al niño sustancias para inducir al vómito y cosas más atroces que en la mayoría de los casos desorientan a los profesionales.
Estos niños suelen ser hospitalizados reiteradas veces presentando síntomas que no se ajustan a una enfermedad tradicional de las más comunes que pueden padecer los pequeños. Inclusive, mucho niños son sometidos a exámenes, cirugías y otros procedimientos dolorosos, molestos y totalmente innecesarios.
Asimismo, la madre sabe disimular muy bien todo lo que hace y en el hospital se mantiene colaboradora y siempre es muy apreciada por médicos y enfermeras por su gran abnegación y el cuidado que presta a su hijo. Generalmente, si el niño es internado y la madre se mantiene lejos por unos días la mejoría será casi instantánea pero sus visitas frecuentes le permiten un fácil acceso para poder inducir más síntomas.
El síndrome de Munchausen es una forma de comportamiento que el adulto toma como propia para llamar la atención de los demás, pero es peligroso ya que puede atentar contra la vida del pequeño involucrado. Por las investigaciones realizadas se ha podido determinar que el progenitor que abusa en la mayor parte de los casos es la madre y el padre ocupa un lugar dentro de la familia casi inexistente y con poca presencia en el hogar.
Existen hoy más de cien síntomas que pueden llevar a los médicos a concluir que están frente a un caso de Síndrome de Münchhausen, siendo los más comunes dolores abdominales, vómitos, diarrea, perdida progresiva de peso sin causa aparente, apnea, infecciones, envenenamiento y un estado de letargo.
Por otra parte, los síntomas que presenta el niño no logran ajustarse a un cuadro clínico clásico y los síntomas mejoran notablemente mientras se encuentra hospitalizado pero recurren cuando regresa a su hogar.
Las madres y/o padres que padecen este síndrome le causan un daño deliberado a su hijo y luego mienten sobre su origen, en ocasiones los motivos pueden ser llamar la atención del entorno, ganarse la simpatía de los demás.
El tratamiento de este síndrome una vez detectado es en primer lugar proteger al niño retirándolo del cuidado del adulto que está causando el daño, iniciándose luego una terapia psiquiatrita que puede ayudar al adulto a tomar conciencia de sus acciones.
La literatura médica aporta datos sobre la forma clínica en que se encuadran estos casos que por lo general afecta a niños menores de 4 años de edad y según las estadísticas en casi el 80% de los casos los daños son causados por la madre.
Foto Vía: taringa