Debido a los avances tanto culturales como sociales e incluso tecnológicos, nuestra manera de comportarnos ha ido adaptándose en los últimos tiempos para evitar que metamos la pata en situaciones concretas sin ni siquiera ser conscientes de ello.
Cómo actuar en el trabajo.
Si estamos buscando un nuevo empleo, la mejor táctica que podemos utilizar es comentarlo con todas las personas que conozcamos y que nos puedan abrir puertas, aunque eso sí, siempre sin excedernos pues podemos llegar a comprometer de una manera desagradable a quien se haya ofrecido. Esperar la llamada prometida es la forma más correcta de actuar y en caso de que no suceda, esperar un tiempo prudencial para efectuarla y recordarle que estamos ahí.
Una de las situaciones en las que es más necesario mantener una correcta posición y saber perfectamente como tenemos que actuar, es a la hora de trabajar. Es bastante normal hoy en día, tener un jefe mucho más joven que nosotros, que en bastantes ocasiones nos lleva a comportarnos como si fuera alguien de nuestra familia. Tener corrección y respeto, será nuestro principal objetivo en estos casos pues deberemos tratarle exactamente igual que si fuera una persona más mayor que nosotros. Con una sonrisa respetuosa conseguiremos resolver la mayor parte de las situaciones.
Al llegar a un trabajo nuevo no debemos de tratar de imponer nuestras costumbres sino todo lo contrario. Nuestra educación pasa por el saber adaptarnos a cada situación sin renunciar nunca a los valores que tenemos. Presentarse a tus nuevos compañeros en el momento de la llegada, seguir el ritmo que lleven ellos y preguntar si tienes dudas, nos ayudará a comportarnos correctamente en nuestro nuevo empleo.
El móvil: ese “mal” tan necesario
El móvil de empresa que se nos ha podido proporcionar por causas concretas, no debe llevarnos a equívocos y debe ser utilizado exclusivamente para el trabajo en jornada laboral. El poder desviarse las llamadas no significa que estemos disponibles las 24 horas del día, especialmente para cuestiones que no estén relacionadas con nuestro trabajo. Será necesario tener especial cuidado con la música de espera o con las respuestas de nuestro contestador ya que éstos deberán ser tan serios como la imagen de profesionales que queramos dar.
Puede ocurrir que en un momento dado nos hayamos quedado sin batería o sin cobertura en nuestro móvil y que tengamos la necesidad de contactar con alguien de una manera urgente. Pedirlo no será un signo de mala educación siempre que hagamos una llamada perdida a la persona con la que queramos contactar para que nos llame a nosotros. En ningún caso deberemos hacer uso del móvil de otra persona, cualquiera que sea la confianza que tengamos con ella.
Es muy normal colocar el móvil sobre la mesa del restaurante pero es importante saber que en realidad es de mala educación atenderlo o hacer uso de él mientras estamos comiendo con otra persona. Siempre habrá que guardarlo en la chaqueta o en el bolso aunque estemos esperando una llamada urgente, en cuyo caso deberemos disculparnos y ponerlo en un lugar de la mesa donde no moleste.