Cada año, unos días antes de lallegada de la Navidad, los padres comienzan a recorrer jugueterías buscando aquellos regalos que sus hijos detalladamente han pedido en sus cartas. Ilusión, ansiedad y gran alegría se verán reflejadas en sus rostros al recibir sus juguetes. 
Sin embargo, es necesario tener en cuenta algunos detalles cuando de comprar juguetes se trata, como la edad del pequeño, sus gustos personales, sexo y también aquellos juegos u objetos que están de moda y que llegan a los niños a través de las series, filmes y dibujos animados.
En primer lugar es necesario optar por aquellos juguetes que no representen un peligro para el niño, un detalle que no es posible pasar por alto sobre todo cuando se trata de niños pequeños que aún no tienen noción del peligro y más cuando se encuentran en la etapa de conocimiento oral, donde todo aquello que se encuentra en sus manos termina siempre en su boca, como una forma de identificar el objeto.
Por lo tanto, es necesario verificar primero que sea realmente adecuado para la edad del pequeño, no estar compuesto por piezas pequeñas, cortantes o que se desprendan con facilidad, ya que se corre el riesgo que el niño lo lleve a su boca y lo aspire provocándole asfixia. Comprar en tiendas que inspiren confianza y siempre asegurarse que el producto posee el sello de control correspondiente.
La edad del niño es otro de los puntos importantes a tener en cuenta ya que entre las finalidades que debe encontrarse en un juguete están la estimulación y el entretenimiento potenciando así el desarrollo del pequeño.
Deben por lo tanto, adecuarse a la etapa de crecimiento y siempre tomar en cuenta las recomendaciones que el mismo fabricante provee en el envase, algo que también previene posibles accidentes.
Comprar un juguete que no se adecue a la edad puede frustrar al niño que no sabrá como utilizarlo o si es a la inversa le resultará sumamente aburrido a un niño mayor al que se le regala un juguete o entretenimiento diseñados para niños pequeños.
A pesar que la mayoría de los niños se inclinan por pedir a sus padres todos aquellos juguetes que ven en la televisión, ya que representan a sus héroes o heroínas predilectos, existen muchas alternativas que además de ser juguetes divertidos son también educativos e incentivan el pensamiento lógico de los pequeños.
La publicidad tiene por objeto hacer que un determinado juguete o marca sean los más vendidos y esto puede influenciar a los niños pero de ninguna manera puede hacer lo mismo con los padres.
La lectura de las etiquetas es algo que la mayoría de los padres no hace, a pesar que se recomienda tomar esta costumbre ya que en ellas la información acerca del juguete es esencial para tomar la decisión de comprarlo o no.
Otras cosas a tener en cuenta es que además de cumplir con los deseos de los niños éstos deben ajustarse al presupuesto con el que cuentan los padres y el lugar del que se dispone en el hogar para luego guardarlos.
El comprar con inteligencia es fundamental. Los pequeños pueden tener cientos de muñeacas o videojuegos y seguir pidiendo siempre las mismas cosas. Es importante entonces, estar cerca de ellos cuando escriben sus cartas de pedidos para hacerles ver aquellos juguetes que no tienen y que pueden ser una excelente alternativa.
Los precios son variados y muchas veces pueden encontrarse los mismos srtículos en distintas tiendas con una diferencia de valor importante. Hacer una pequeña investigación en las tiendas on-line puede ser una buena idea para tener noción aproximada de los precios de un mismo juguete o marca.
Optar por un producto de buena calidad es mejor que comprar muchos de calidad baja que en poco tiempo estarán deteriorados.
Llevar en consideración estos consejos puede ayudar a muchos padres que aún no han comprado los regalos para los pequeños y representar una satisfacción por partida doble tanto para los niños que estarán felices en recibir sus obsequios y para los padres que estarán tranquilos de haber realizado buenas adquisiciones.
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