En cuestión de alimentación, la Navidad es un momento bastante conflictivo sobre todo si se está embarazada. La idea que todo el mundo tenemos de que no se debe exagerar con los cambios que hay que introducir en la alimentación, especialmente durante la etapa de la gestación, no sirve para mucho cuando se acerca la Navidad, que es una época que se encuentra llena e excesos así como de cambios en las comidas, que no acontecen durante el resto del año.
¿Qué se puede comer sin riesgo durante las navidades?
Las comidas que tienen lugar durante la época navideña van, inevitablemente, ligadas al marisco, y es cuando se vuelve al inevitable debate de si se debe comer o no marisco durante el período de gestación. Si durante estas navidades te encuentras embarazada, no es necesario saltarse aquellos platos que contienen marisco en el menú de Navidad. Para no correr ningún tipo de riesgos, simplemente es necesario no abusar de ellos y sobre todo, comer marisco que esté crudo.
Y es que en realidad, cualquier alimento que se consuma crudo durante el embarazo, supone un riesgo, por lo que se debe comer durante esta época todo bien hecho, tanto el pescado como la carne. Así que si se está pensando en incluir en el menú navideño algo de carpaccio o de sushi, te aconsejamos que este año lo sustituyas por alimentos que se encuentren bien cocinados. También conviene evitar, así mismo, el salmón ahumado, un alimento que es muy habitual durante las navidades.
El objeto de evitar ciertos alimentos como por ejemplo los embutidos, los pescados o la carne crudos o poco hechos, es evitar ciertas enfermedades como la listeriosis o la toxoplasmosis que pueden llegar a perjudicar el desarrollo del futuro bebé. No hay que tener ningún tipo de inconveniente en dejarse mimar durante estas fiestas pero sin dejarse llevar por el típico espíritu navideño, ya que se debe cuidar la alimentación durante el embarazo más que nunca.
Igualmente se debe tener especial cuidado con los productos lácteos, ya que se deben consumir los que estén elaborados con leche que no esté pasteurizada. Hay que evitar el queso fresco y procurar que cualquier postre que sea casero, se encuentre pasteurizado. Lo mismo sucede con el foie y el paté, ya que aunque resulten un manjar en la mesa de Navidad, durante el embarazo resultarán menos peligrosos cuanto menos procesados se encuentren.
Durante estas navidades no hay que olvidarse de llevar ciertos hábitos que sean lo más saludables posibles, ya que estas fiestas se encuentran caracterizadas por adoptar ciertos hábitos que pueden llegar a resultar perjudiciales, relajándose las buenas costumbres. No se debe permitir que se fume durante las reuniones familiares y de amigos mientras te encuentres delante y por supuesto, no pruebes nada de alcohol, ni siquiera un sorbo de champán, porque puede llegar a poner en peligro tu gestación. Disfruta de estas navidades pero siempre con la precaución que merece tu nuevo estado.