Las bebidas energizantes no son recomendables ni para niños ni para adolescentes, debido a que tienen sustancias que pueden resultas fatales para su salud y desarrollo, ademas que generan problemas como la obesidad o diabetes desde muy corta edad. Las bebida energizantes cada vez se distribuyen y consumen más y frecuentemente las consumen deportistas o personas adultas, pero a veces son consumidas por algunos niños o adolescentes, pero lo que pocos saben es que pueden llegar a ser peligrosas para su salud y para los pediatras es muy complicado generar un mensaje para que ningún padre deje que sus pequeños consuman este tipo de bebidas. Hay una diferencia entre las bebidas energizantes y deportivas y la forma en la que actúan en el cuerpo es muy diferente ya que las deportivas lo que hacen es hidratar después de una larga jornada deportiva mientras que las energizantes si alteran el funcionamiento de su cuerpo llenándoles de energía momentánea pero generando males en otros niveles, por ejemplo, neuronales.
Pero lo mejor es que no consuman ni la una ni la otra, pues para la hidratación nada mejor que el agua y una buena alimentación. Sumando es estos problemas, estas bebidas son azucaradas en exceso y son las responsables de del sobrepeso y la obesidad a tan temprana edad, por eso mismo es más saludable el agua, sin contar con la aparición de las caries y hasta ciertos riesgos de diabetes.De acuerdo a las estadísticas en diversos países, se han presentado emergencias por consumo de este tipo de bebidas, incluso el porcentaje sobrepasa el nivel de los que llegan afectados por sobredosis de drogas y alcohol. También se evidencian los mayores peligros con respecto a la salud, como el insomnio, arritmias cardiacas, ansiedad, ciertos malestares digestivos que pueden agravarse, hipertensión y deshidratación, que a tan corta edad pueden resultar fatales.
Para los adolescentes los riesgos son mayores, porque están empezando a combinar el consumo de estas bebidas con alcohol que es una mezcla mortal, de acuerdo a los nutricionistas, las bebidas energéticas no son consideradas como un alimento sino un suplemento dietético, por lo cual las legislaciones de estos productos no son tan grandes ni tan especificas y además son consumidas por personas que saben y deben seguir ciertas recomendaciones. El problema es que las bebidas energizantes contienen sustancias que alteran el sistema nervioso como la cafeína y la taurina, pero en grandes cantidades y no es posible saber cuánta es su concentración, por mas especifico que este en la etiqueta, ya que según estudios, muchas veces, es mucho más alto y para el caso de la cafeína es recomendable que no se consuma ni en niños ni en adolescentes porque loes estímulos que produce son muy fuertes y deterioran rápidamente la salud de los pequeños y jóvenes.