Una de las mayores ilusiones de los padres cuando esperan a un bebé es poder elegir su nombre, ya sea mujercita o varón, el nombre que le pongan será aquel que llevará consigo toda la vida, es por ello la importancia de elegir el correcto. Para poder hacer una buena elección hay varios factores que se pueden tomar en cuenta a la hora de ir planeando, el principal es hacerlo con tiempo, ya que si se sabe con antelación el sexo del bebé la tarea será más fácil, de lo contrario simplemente hay que evaluar ambas posibilidades.
Factores a tomar en cuenta
La armonía del sonido en el nombre es muy importante ya sea que se elija un nombre con sonido fuerte o suave, esto se puede elegir igualmente al momento de nacer según su personalidad, de igual forma se debe buscar un empate entre ambos nombres si es que se eligen dos, así como la interacción con el apellido.
Se deben evitar aquellos nombres que por tratar de ser originales ponen en riesgo la interacción social del pequeño al burlarse en la escuela, lo mismo con las rimas o juegos de palabras que se forman entre el nombre y el apellido, de igual forma se deben evitar nombres en idiomas extranjeros si no se sabe su significado antes.
Por lo regular las personas manejan uno o dos nombres, estos deben ser cortos o en equilibrio: uno corto y otro largo, pensando en la vida futura del hijo y su papel en la sociedad. Hay que evitar aquellos nombres difíciles de escribir o que por originalidad se cambian en letras, por ejemplo colocando una “h” en medio de Ana (Anha), con esto lo que se generará serán errores continuos en papeleos o trámites.
Una práctica que muchos padres emplean es el de repetir nombres de generación en generación agregando I,II, II, IV, lo cual también es muy válido. Si se tiene el deseo de llamarle con otro nombre que no siga esta tradición, se puede utilizar como segundo, de igual forma se debe considerar el sexo del bebé antes de repetir el nombre de la abuela, por ejemplo si éste es un varón.
Otra opción para encontrar el nombre ideal puede ser basando la búsqueda del origen y significado, poder en un futuro decirle a un hijo que su nombre representa fuerza y honestidad no sólo ayuda a forjar su personalidad, sino que además se entiende como un lazo muy especial entre los padres y su hijo o hija.
Cabe destacar que en ciertos países se han reformado leyes para limitar a los padres de nombrar a sus pequeños con palabras inventadas, juegos de letras, etc., si bien esta es una elección libre con o sin ley se debe considerar sobre todo el bienestar y tranquilidad del hijo en todo momento.