Esta fruta procedente de las Islas Canarias, es uno de los alimentos más ricos en vitaminas, proteínas y sales minerales que además de poder ser consumida como postre cuenta con numerosas posibilidades a la hora de servirlo en la mesa. 
Consejos a la hora de consumir y comprar los plátanos
A la hora de comprar unos plátanos hay que tener en cuenta que existen diferentes tipos aunque los más presentes en España son los plátanos canarios y la banana. La diferencia entre ellos es que este último cuenta con una carne algo más seca, con menos sabor y con una textura harinosa ya que permanece menos tiempo en la planta que el plátano de Canarias que se distingue por tener una carne mucho más sabrosa y olorosa con una forma más alargada y más pequeña que la banana. En cualquiera de los casos a la hora de adquirirlos es muy importante que no tengan ningún golpe ni magulladuras para poder disfrutar de su sabor como se esta fruta se merece.
El momento perfecto para consumir el plátano es cuando su piel cuenta con un color amarillo intenso con pequeñas manchas de color marrón. En caso contrario, es decir, si la piel todavía está verde puede llegar a resultar algo indigesto. Para conservarlos, la mejor opción es mantenerlos en un lugar fresco y seco, sin que les de la luz directamente ya que en caso de meterlo en el frigorífico, algo por otra parte que muchas personas hacen, la cáscara se volvería de color negro y su aspecto externo resultaría desagradable, aunque no por ello su sabor.
Nuevas opciones a la hora de consumir plátanos
El plátano de Canarias tiene un gran poder saciante y aporta tan sólo 80 calorías por cada 100 gramos de este alimento. Una vez lo hayamos pelado, se recomienda rociarlo con un poco de zumo de limón, si no se va a consumir inmediatamente, para evitar su oxidación. Además esta fruta se puede congelar una vez pelada o hecha puré, para lo que es aconsejable incorporar a la pasta obtenida con el plátano un poco de zumo de limón y algo de azúcar.
Aunque esta fruta se consume principalmente como postre, existen muchas formas de prepararla, para la mayoría de las personas desconocidas, con las que se obtienen platos tan deliciosos como sopas o guarniciones que pueden acompañar a cualquier carne o pescado, como por ejemplo una exquisita merluza con plátano caramelizado con lo que se consigue una mezcla se sabores que resultan un auténtico lujo. Además es muy utilizado a la hora de preparar deliciosos helados, granizados para las épocas más calurosas o espumas mezcladas con un poco de cava que resultan perfectas para ser degustadas en ocasiones especiales.
