Si estás buscando unas vacaciones familiares y de verdadera calidad, te recomendamos algunas de los siguientes destinos donde los niños podrán disfrutar tanto o más que vosotros. Toma nota.
El Bosque encantado en Huesca
En el Valle de Tena, muy cerca de Panticosa, se puede disfrutar de este lugar, uno de los más emblemáticos y puros del Pirineo aragonés. Aquí es posible encontrar numerosas propuestas para toda la familia como talleres, excursiones, instalaciones para el juego, piscina, animaciones, espectáculos, deportes, etc.
Cabo de Gata en Almería
Sus pueblos, su paisaje volcánico, su costa y la tranquilidad que se respira aquí, hace que sea uno de los lugares más visitados de España. Además de recorrer todas sus playas y calas, de ver las instalaciones de unas antiguas minas o las salinas, es posible acercarse hasta el desierto de Tabernas, escenario de múltiples películas del oeste o visitar las cuevas de Sorbas, unas cuevas de yeso donde se puede realizar un recorrido muy entretenido e interesante junto a un guía.
Sierra de Urbasa en Navarra
En otoño, cuando las hojas de haya tiene un precioso color amarillento y rojizo, es una época perfecta para visitar esta sierra situada al oeste de Navarra, limitando con Euskadi. Este parque se puede cruzar desde Olazti hasta Zudaire y mientras tanto se puede parar en numerosos lugares para disfrutar de la naturaleza del lugar o visitar el área de interpretación donde se puede descubrir mucho más sobre el parque o dar un paseo por el bosque cubierto de musgo o incluso asomarse al «balcón de Pilatos», donde se puede contemplar el valle de Amescoa desde casi mil metros de altura.
Doñana y las playas de Huelva
El parque de Doñana, declarado como patrimonio de la Humanidad, acoge hasta doscientas mil especies de aves acuáticas todos los años. Los más pequeños de la familia seguro que se lo van a pasar en grande en este lugar descubriendo su fauna y su flora y como no, jugando en las playas de fina arena onubenses.
Valle de Karrantza en Vizcaya
Este valle está muy poco transitado por desconocimiento, por eso es el verdadero pulmón verde de la comarca conocida como Enkarterri. Se encuentra lindando con Burgos y con Cantabria y debido a que poca gente lo conoce, permanece inalterado y virgen, de ahí la mayor parte de su encanto. Toda la familia podrá disfrutar del aire puro que se respira en este rincón de España.
Entre los sitios más recomendados de este lugar para visitar con niños se encuentra el Karpin aventura, un centro de acogida y recuperación de animales. Aunque pueda parecer que es un zoo, en realidad es un lugar didáctico en el que los niños podrán ver durante el recorrido osos, avestruces, monos, linces y una zona con maquetas de dinosaurios. También se volverán locos en la cueva de Pozalagua gracias a sus excéntricas estalacticas situadas en una cavidad subterrénea de enorme belleza.
