Esta enfermedad leve, se manifiesta por un enrojecimiento en la piel que se encuentra en contacto con el pañal. Es posible prevenirla si se toman algunas medidas que a continuación vamos a contarte para que tomes nota.
Síntomas de la dermatitis del pañal
Cuando el bebé sufre este problema siente picazón, se encuentra inquieto e incómodo y gime o llora con frecuencia. Dicha irritación va evolucionando hasta que la piel se pela provocando incluso a veces grietas y un poco de sangre. Si no se trata correctamente, existe el riesgo de que se extienda más allá de la zona del panal.
La aparición de la dermatitis del pañal se produce por el roce, la humedad y la falta de aire. También se produce por las deposiciones, especialmente cuando son ácidas como las diarreas, por productos con los que se lavan los panales de tela, por el amoníaco producido por la orina o por un abuso de jabones.
¿Cómo se puede prevenir?
Se debe cambiar el pañal con la mayor frecuencia posible, comprobando si el bebé está húmedo o sucio cada hora y como mínimo una vez por la noche. Se puede probar por cambiar de marca de pañales y cada vez que se cambien, se debe lavar con agua templada y quitarle bien los restos de crema que hayan podido quedarle. No se deben utilizar paños ni toallitas ya que aumentaría la irritación de la piel. Tampoco hay que utilizar jabón ya que debilita la barrera de protección natural que tiene la piel. Se debe dejar la piel del bebé una parte del día al descubierto, como por ejemplo, después de bañarlo. También puedes optar por usar pañales que sean más grandes para que le queden más holgados y haya mayor ventilación. Si el pediatra no te lo ha recetado, no uses antibióticos ni ningún otro tipo de medicamentos y recuerda lavarte siempre las manos después de haberle cambiado el pañal.
¿Cómo se debe cuidar la piel de tu bebé?
La aparición de este tipo de dermatitis puede verse potenciada por una alimentación incorrecta o por una infección gastrointestinal. Un exceso de azúcar en su dieta favorece la aparición de hongos, por lo que es muy importante pensar en el tipo de alimentos que se le está dando al bebé.
Por otra parte un exceso de higiene también puede irritar la piel tan delicada del niño, ya que el manto ácido de ésta todavía no está desarrollado por completo y si se le baña a diario, puede desaparecer la barrera natural que se forma para luchar contra las bacterias y gérmenes, por lo que se debe procurar no favorecer la aparición de irritaciones, no bañándole por ejemplo más de cuatro veces a la semana y de que estos baños no sean ni muy calientes ni muy largos. Recuerda que es mejor en cualquier caso un baño que limpiarle con una toallita ya que la fricción puede ser más agresiva para él. Por último no olvides aplicar cremas a tu bebé después de cada baño para favorecer la hidratación de su piel.