Muchas veces como padres se desconoce el por qué la actitud de los niños frente a algunas situaciones. Por ello es importante estar atentos a su día a día, para así conocer las razones de malos comportamientos, malas palabras y en algunos casos malas acciones. Los malos hábitos son parte del crecimiento y desarrollo del niño. Tus hijos no son conscientes de la situación, pero a medida que van creciendo pueden superarlos por sí mismos. Sin embargo, es importante que conozcas acerca de los malos hábitos en sus hijos:
Los malos hábitos pueden ser parte del crecimiento
Las cosas que consideras como los malos hábitos, pueden ser de hecho una parte del crecimiento de tu hijo. Tu pequeño puede no saber que los tiene en cuenta, los malos hábitos no son malos en realidad. Por ejemplo, si tu hijo se sienta a chuparse el dedo al principio parece fascinante porque lo hace de niño, pero cuando comienza a crecer y se da cuenta que es un mal hábito, debe corregirlo y sino allí estás tú para orientarlo.
Los malos hábitos son una forma de consuelo para los niños
Muchos expertos creen que los niños desarrollan malos hábitos con el fin de consolarse a sí mismos. A veces, los niños empiezan a chupar su ropa cada vez que dejan de gritar. De esta manera puede que se sientan seguros y cómodos.
Castigo por los malos hábitos
Se recomienda encarecidamente no castigar a los niños de los malos hábitos. Castigar o avergonzar a los niños por esta razón, puede conducir a situaciones peores. Es mejor enseñar a tus hijos sobre las consecuencias de los malos hábitos y tratar de reemplazarlos por los buenos.
Ahora bien una vez analizados y explicados los aspectos anteriores, es importante conocer también cómo quitar el mal hábito de los niños. Según la Dra. D’Arcy Lyness, psicóloga pediatra de kidshealth.org, la mayoría de los hábitos desaparecen por sí solos, pero existen algunos pasos para tratar de evitarlo:
– Dile claramente a tu hijo qué es lo que no te gusta de su comportamiento.
– Evita regañar o castigar a tu hijo. No lo dejes en ridículo ni lo critiques. Podrías conseguir que el comportamiento empeore.
– Anima a tu hijo a que abandone esa mala costumbre. Dile como quieres que se comporte, en lugar de decir lo que no debe hacer.
– Recompensa y premia a tu hijo cuando demuestre autocontrol
Es de saber que una de las razones por la que adquieren una mala conducta es cuando el niño no encuentra ni tiene palabras para expresar lo que siente o lo que le preocupa, es entonces cuando terminan comunicándose a través de alguna mala costumbre, lo que quiere decir que terminan adquiriendo un mal hábito para llamar tu atención. Es probable que, en estos casos, el niño se desahogue en una mala acción que se convertirá, en muchos casos y con el tiempo, en un mal hábito.
Si bien es cierto que los hábitos tardan en desarrollarse, también debes estar claro que sustituir su comportamiento actual, no será de la noche a la mañana, debes tener paciencia.