?Yo no empecé. ?l me pegó primero??. ?Ella arruinó mi juego, Siempre se está metiendo con mis cosas??. ?¿Por qué ella puede ir y yo no? ¡No es justo! 
¿Te suena familiar? Si tienes dos o más hijos, seguramente sabes lo intensa y dolorosa que puede ser la rivalidad entre hermanos. A veces los niños discuten por las cosas insignificantes, sin embargo, poder resolver los conflictos está lejos de ser algo sin importancia.
Los expertos aseguran que las peleas entre hermanos afectan la autoestima y autonomía de los niños, alteran la armonía familiar e influyen en la forma en que elegirán a sus amistades en el futuro. Incluso la manera en que los adultos lidian con sus problemas puede ser reflejo de los conflictos que tuvieron con sus hermanos en la infancia.
Es indudable que los celos, la ira o la sensación de injusticia que a veces prueban los niños, interfieren con nuestro objetivo de inculcarles el cariño y la importancia de valores como compartir y cooperar con los demás.
Para tener éxito en esta misión, prueba con algunos de los siguientes consejos.
Busca el origen del problema
A menudo los adultos intervenimos en un conflicto justo cuando estalla la violencia, por lo que resulta imposible determinar qué provocó la pelea. El niño que arma un alboroto mediante un acto hostil, como pegar, tal vez solo esté respondiendo a las continuas provocaciones de su hermano. Comprender lo que realmente sucede, es la mejos manera de ayudar a ambos niños, obviamente sin tomar partido por ninguno de ellos,
Refuerza el comportamiento positivo elogiando actitudes de sana convivencia como por ejemplo, prestarse sus juguetes o invitarse a sus juegos.
Lo mejor es esperar a que se calmen
Cuando los niños se enojan, la ira impide que procesen la información de manera correcta. Lo mejor es esperar a que se calmen, y recién entonces tratar de que expresen sus emociones, lo que les permitirá entender el punto de vista del otro.
Cuando los niños saben que sus sentimientos son tomados en cuenta, tienden a mostrar mayor empatía hacia los demás.
Enséñales con juegos
Por lo general a mamá le toca dirimir las disputas, pero según cierto estudio, la influencia del padre tiene mucho más peso cuando se trata de cooperar. El papá que le enseña a su hijo a compartir y a establecer turnos, le está inculcando un estilo de interacción que fomenta la cooperació. Los juegos en familia son una gran oportunidad para que los padres inculquen la cooperación en sus hijos.
Los chicos buscan de manera natural la cercanía y el amor de la familia. Cuando conocen el valor de la cooperación, esta cualidad se extiende a otros aspectos de su vida y les atrae la amistad de otros chicos.
Enseñar a nuestros hijos a expresar sus sentimientos, a transigir y a divertirse con sus hermanos es un regalo para toda la vida.
