Un sentimiento totalmente normal tanto en adultos como en los niños los celos se manifiestan de diferentes formas pero en los niños se dan algunas situaciones distintas a pesar que siempre es una reacción pasajera donde el apoyo y comprensión serán fundamentales para sobrellevar el problema.
Cuando se trata de celos por el nacimiento de un nuevo hermano esto puede durar hasta que el niño llegue a la adolescencia y por ello será necesario dejar en claro ciertas pautas desde un principio.
En ellas los padres deberán dejar en calor que entienden aquello que le ocurre pero que no permitirán un comportamiento incorrecto, dejando así claros las normas de convivencia dentro de la familia también límites claros.
Cada niño puede tener una reacción distinta ante la misma situación. Así es posible ver hermanos que ignoran al nuevo integrante de la familia y se vuelven hostiles sobre todo hacia su mamá.
Los celos no se limitan solo al ámbito familiar sino que también existen niños que en los que los celos surgen en la escuela y por ello pueden llegar a agredir a los otros niños en especial a los más pequeños.
También existen los casos de niños que hacen todo lo contrario y procuran brindar toda su colaboración a los padres ya que suponen que con ese tipo de comportamiento podrán asegurarse el amor de ellos.
Algunos niños no hacen ninguna manifestación de manera abierta sobre sus celos y en realidad prefieren no tener participación en nada que se relaciones con el nuevo hermano.
Cuando el niño se encuentra transitando la primera etapa de los celos por la llegada de un nuevo integrante de la familia puede tener dificultades para dormir o para alimentarse, además de un descontrol de los esfínteres y comenzar a hablar con un lenguaje aniñado que no coincide con su edad cronológica.
Este tipo de reacciones se dan porque el pequeño siente que el bebé le ha quitado la atención y el tiempo que sus padres le dedicaban. Piensa que comportándose él también como un bebé sus padres le prestarán la misma atención que al bebé.
Por todo esto, es importante seguir brindándole la misma atención que se le daba antes de la llegada de su hermano y demostrarle cuanto lo aman y lo importante que es como persona, como hijo e integrante de esa familia.
Los padres no deben sin embargo, desesperarse ante una regresión del niño porque además de ser normal es también pasajera y generalmente esto solo dura unos días.
Es importante también hacer una preparación previa a la llegada del bebé, hablar de forma clara con el niño y explicarle que las cosas cambiarán porque es algo lógico, además es esencial disipar las dudas que el pequeño pueda plantear a sus padres.
El niño debe saber y sentir que sus padres los seguirán amando de la misma forma además de tranquilizarlo esto le dará mayor seguridad sobre los sentimientos de sus padres hacia él.
La mayoría de los especialistas aconsejan que se estimule al niño a dejar de lado sus conductas regresivas y siempre aplaudir sus logros y progresos para demostrarle todas las ventajas que tiene el ser el hermano mayor.
Tener paciencia y ser comprensivos y tolerantes con el niño teniendo siempre presente que los celos son algo natural en cualquier etapa de su vida y en un tiempo prudencial si los padres manejan bien la situación el pequeño aprenderá a compartir el cariño de sus padres además de darle un lugar al nuevo integrante de la familia.
Foto Vía:Parents