Sobre el autismo hay todavía mucha desinformación y numerosas creencias equivocadas que hay que ir desterrando. Por eso hoy queremos aclarar algunas dudas que en la actualidad aún existen sobre este trastorno. ¡Apunta!
Cosas que no sabías sobre el autismo infantil
El autismo no es ninguna enfermedad, sino un trastorno que afecta a tres zonas importantes: la del comportamiento, la de las relaciones sociales y la de la comunicación.
Los niños que tienen autismo no se encuentran en «un mundo lejano», ni aislados, la diferencia es que se comunican de una manera diferentes. No utilizan normalmente palabras, sino pictogramas o imágenes, y aunque no suelen fijar su mirada cuando están hablando y no usan casi ninguna palabra, no están en «otro mundo».
Tampoco se traumatizan si les tocan y pueden llegar a ser muy cariñosos, ya que aunque sus habilidades sociales estén algo mermadas, no significa que no puedan expresar sus sentimientos.
No todos los niños con autismo son iguales. Cada uno tiene sus propias particularidades ya que el autismo, como hemos dicho, afecta a tres áreas distintas y en distinto grado, es decir, un niño que tiene autismo puede tener problemas más graves de comunicación pero menos de comportamiento, mientras que otro puede tener más dificultades en el área de las relaciones sociales. En conclusión, el autismo infantil es como los colores: cada uno puede tener distintas tonalidades.
Aunque el autismo tiene un componente genético claro, no significa que sea hereditario. Puede ser provocado por una mutación genética antes de que el bebé nazca, es decir, que tiene este trastorno desde el momento en el que nace, aunque no puede diagnosticarse hasta pasado más tiempo, y por supuesto de momento, tampoco puede hacerse durante el embarazo. Lo que sí se sabe es que nacen más niños con autismo que niñas, de hecho, por cada cuatro niños que tienen autismo, solo una niña lo tiene también.
El Asperger se encuentra dentro el autismo, lo que pasa es que cuenta con algunas particularidades, aunque desde luego que se considera autismo. Los niños que sufren este trastorno, son niños con autismo pero que tienen un gran potencial, con una capacidad de aprendizaje excelente, aunque sus capacidades sociales pueden verse mermadas.
Los niños con autismo pueden y deben ir al colegio, tanto a los que cuenten con modalidades especiales como colegios ordinarios de inclusión que tengan aulas que cuenten con refuerzo y apoyo educativo. Existen muchas opciones para que los niños con autismo puedan ir al cole, aunque sí que es cierto que todavía falta entre los docentes, una mayor formación.
A día de hoy no existe cura para el autismo, ni tampoco una fórmula mágica que pueda eliminarlo, lo único existente son terapias personalizadas para intentar mejorar la calidad de vida de los niños que lo padecen.
Aunque es cierto que un niño con autismo puede tener trastornos alimentarios ya que son muy selectivos con la comida, al igual que con todo lo que les rodea, este trastorno no tiene nada que ver con la celiaquía como en ocasiones se ha comentado.