Los pañales para muchas madres, sobre todo primerizas, pueden ser un reto, pero una vez vencidos los miedos y tal vez el asco, hay que tener en cuenta consejos básicos para evitar quemaduras o infecciones en los genitales del bebé. El pañal es un elemento básico a la llegada del bebe por cuidado de su higiene mientras crece y aprende a ir al baño, descanso y seguridad, además de tranquilidad de la madre. Aunque no todas saben cambiarlo cuando tienen al bebé, y a muchas otras les puede dar cierta incomodidad o asco, pues no es fácil para ellas ver excrementos de alguien, limpiarlos y tal vez ensuciarse con ellos, por más hijo que sea.
Lo importante es aprenderlo, realizarlo en el momento adecuado, estar muy pendiente de su estado y no solo por si está limpio o no, sino por su posicionamiento y la comodidad del bebé, pues esta tarea durará muchos meses, por lo menos unos 24 o 36. También hay que tener en cuenta que por más experiencia que se gane al limpiarlo y cambiarlo, hay que cuidar aspectos básicos como la protección del ombligo, pues en un recién nacido aun no ha caído el residuo del cordón umbilical y es fácil que por acción de la orina se generen malos olores o infecciones.
Lo básico para cambiar un pañal
– Inicialmente pañal limpio y ahora las facilidades son muy grandes, pues son desechables, ya que en viejas épocas, eran de tela y tenían que ser lavados.
– Implementos para lavar la colita, por ejemplo: agua tibia, toallitas húmedas o algodón, este ultimo sobre todo para los bebes con piel muy sensible.
– Cremas protectoras para la colita, ya sea para prevención o para curación, pues hay muchos niños que pueden sufrir de pañalitis y quemaduras, lo que puede causarles mucho dolor, estrés y miedo para volver a hacer sus necesidades.
– Cuando se esté en lugares diferentes a la casa, sobre todo públicos, hay que contar con un cambiador, sobre todo de superficie plástica e impermeable, pero sobre todo que el bebé se sienta cómodo.
– También el espacio es muy importante pues debe ser cálido, con luz, y sin corrientes de aire. La higiene es importante, por ello hay que lavarse las manos antes y después de hacer el cambio de pañal.
El meconio o primeras heces del bebe debe ser limpiado con más dedicación, pues es mas pegajosa y mancha mucho la piel del bebé, una vez pasada esta defecación, ya vienen las normales de cualquier ser humano, pero esto sucede alrededor de los tres o cuatro días siguientes.Para colocar el nuevo pañal, es importante si se es primeriza, seguirlas indicaciones del pañal, pues hoy en día los decoran con gráficos y animales que indican que lado debe ir adelante y cual atrás.
Aunque es sabido que hay que levantar las piernas, esto debe hacerse con mucho cuidado pero con firmeza, para poder poner la parte trasera en su espalda, pero sin causar daño en su columna o cabeza. A los bebés de género masculino, lo recomendable es poner el pene hacia abajo, para evitar que la orina se filtre por la espalda o la barriguita.Por último hay que tener en cuenta la etapa del pañal, pues depende de la talla del bebé, aunque hay unos que pueden varias dependiendo del tamaño del bebé, pues hay unos muy grandes y otros muy pequeños.