El embarazo no implica que las mascotas tengan que ser abandonadas, simplemente evaluar las condiciones para poder conservarlos y re educarlos si hay alguna falla. Hay cientos de mitos acerca de lo que las mascotas pueden generar cuando una mujer queda en embarazo y aunque hay alguna parte de cierto, no se puede afirmar que es necesario que cuando una mujer está esperando un bebé, está prohibido que tenga contacto con cualquier tipo de animal domestico. No hay que dejar de lado el hecho que para muchas familias los perros o los gatos se convierten en un miembro mas de la familia y aunque la idea no es humanizarlo, si hay un respeto por su vida y sus derechos simplemente por su compañía y su cariño.
Las afecciones pueden aparecer dependiendo del tipo de organismo de la mujer, de su sistema inmunológico y de los aspectos que la marcaron durante su crecimiento y si estuvieron relacionados con animales. Obviamente hay que seguir algunos consejos mientras se esté en embarazo y no se podrán realizar algunas actividades que se realizaban antes, pero no quiere decir que se tenga que sacar al animal de la casa y buscarle un nuevo hogar. Con los perros no se presenta mayor inconveniente como en el caso de los gatos. Algo que se debe dejar de hacer es que los perros salten encima del cuerpo específicamente encima del estomago. También hay que corregirle los malos hábitos como el que muerda los objetos a su alrededor, su ladrido excesivo, el acostarse en los muebles o las camas, o que tenga la manía de correr o saltar en todo momento, pues cuando nazca el bebé deben evitarse todo este tipo de comportamientos para que no haya inconveniente entre amos y mascotas.
Para evitar que se generen celos por parte del animal por la estrechez de la relación, hay que buscar un familiar o amigo que facilite generar otro tipo de trato y se genere un poco de desapego hacia su dueño. Con respecto a los gatos si hay una recomendación especial, pues son justamente ellos quienes provocan la toxoplasmosis, enfermedad que puede generar peligros en el embarazo, amenaza de aborto o mal formaciones. Esta afección se da a causa de una bacteria que se aloja en las heces de los gatos y que se transmite fácilmente, lo peor es que no se da inmediatamente si hay una convivencia actual con el gato, sino que puede tenerse desde varios años atrás si se tuvo un gato en la infancia.
Frecuentemente se manifiesta con dolores en el cuerpo, dolores de cabeza y síntomas semejantes a los que produce una gripa común. Para esto es necesario que los dueños del gato le encomienden la labor de limpieza a otra persona, enseñarle al animal a ser casero y que no se escape cada momento pues puede adquirir otras enfermedades con otros gatos callejeros, tener hábitos de higiene frecuentes y el más común es el lavado de manos sobre todo después de tocar las mascotas.Otro tipo de mascotas comunes son los hámsteres y los conejos que también son transmisores de un virus y solo con tocarlo puede adquirirse y generar efectos parecidos a la toxoplasmosis.