El ácido fólico es una vitamina muy importante para el bebé durante su gestación, ayudando a prevenir defectos en el cerebro y en la medula espinal de éste si se toma antes del embarazo y durante las primeras semanas.
¿Por qué resulta tan importante tomarlo antes del embarazo?
Según estudios realizados, si se consume la cantidad de ácido fólico recomendada antes del embarazo y durante el primer mes del mismo, se reduce el riesgo de que el bebé nazca con defectos en la columna vertebral y en el cerebro, siendo la anencefalia y la espina bífida los problemas más comunes.
La anencefalia consiste en un subdesarrollo importante el cerebro y del cráneo del recién nacido y la espina bífida es una de la principales causas de discapacidad en los niños. Con el consumo de ácido fólico se pueden prevenir estos problemas además de otros como la fisura palatina o el labio leporino.
¿Cuál es la cantidad de ácido fólico que se debe tomar?
En los adultos y adolescentes el ácido fólico requerido a diario está en torno a los 400 microgramos, pero durante el período de gestación, la demanda es más elevada requiriéndose unos 600 microgramos cada día y dado que el cuerpo no puede producir tanta cantidad, será necesario hacerlo a través de una dieta o de suplementos de ácido fólico.
¿Dónde se encuentra el ácido fólico?
Se encuentra en ciertos alimentos como los vegetales, frutas o cereales integrales, pero resulta difícil conseguir la cantidad que se necesita durante el embarazo, solo con la dieta. Por eso los doctores recomiendan el uso a diario de un complejo multivitamínico que aporte la cantidad necesaria, puesto que con la dieta solo se conseguirían 200 microgramos aproximadamente, cuando se necesitan 600 microgramos como ya hemos comentado anteriormente.
Aunque diversos estudios han demostrado que una ingestión mayor de ácido fólico cada día antes del embarazo y durante los primeros meses de éste, puede llegar a reducir el riesgo de que el bebé sufra un problema físico hasta en un 70%, lo cierto es que no se debe sobrepasar la cantidad de 1000 microgramos por día.
Por eso desde aquí te recomendamos que acudas a tu médico si estás planeando quedarte embarazada para que te realice un examen físico completo y pueda comprobar si te falta algún nutriente y qué vitaminas son las más apropiadas para ti.
Cocinar con ácido fólico
El ácido fólico es muy sensible por lo que tener especial cuidado a la hora de cocinar. Se debe procurar cocinar con ingredientes que sean frescos ya que se puede disminuir a largo plazo el contenido de sus vitaminas. Es soluble en agua y muy sensible al calor, por lo que hay que prestar atención en su preparación. Con el fin de conseguir la mayor cantidad durante el embarazo, es recomendable consumir algunos de los alimentos que lo contienen, en crudo.