Así un padre o madre sea nervioso o cuide mucho a sus hijos, debe aprender de primeros auxilios porque no esta exento de que suceda algún accidente Los bebes o los niños a veces suele presentar algunos accidentes que aunque pueden ser solucionados en la casa ponen muy nerviosos a los padres y no saben cómo actuar, o incluso pueden empezar cierta atención en el hogar para después llevarlo a un hospital pero un poco mas estabilizado. Generalmente los problemas son de dos tipos, por ejemplo, cuando son menores de tres años las urgencias que se presentan son de tipo medico por cualquier enfermedad ya sea pasajera o un poco más estable y otra es cuando son mayores de 3 años que frecuentemente se dan por accidentes porque son muy traviesos, hiperactivos o no hacen caso.
Las urgencias que más se pueden presentar es la dificultad respiratoria y se identifica fácilmente por un ruido nasal, porque sus fosas nasales se mueve o porque el pecho les suena al respirar. Otro caso son las convulsiones que asustan a cualquiera pero se debe actuar con rapidez para tratar de estabilizarlo y llevarlo después de urgencias. Lo primero que los padres deben hacer es posicionar al niño en una superficie rígida y generalmente boca arriba exceptuando si hay convulsión. Para quienes tienen niños de 1 a 8 años debe haber una precaución si hay algún tipo de lesión y no movilizarlo rápidamente porque se pueden generar mas daños, observar si hay respiración o si hay algún elemento que obstruya este proceso, frecuentemente hay que elevarles el mentón hacia atrás porque puede haber una traba en la tráquea porque no hay suficiente espacio para respirar.
El auxilio es dar respiración boca a boca con una frecuencia de 20 respiraciones por minuto y para saber cuándo detenerse es observar si el tórax se infla, en este punto ya no se da más aire. Para los lactantes de 0 a 1 años se sigue el mismo procedimiento pero la frecuencia es de 10 a 30 respiraciones por minutos. Para quitar la obstrucción respiratoria es necesario colocar al bebe boca abajo y colocando la cabeza en la palma de la mano y golpear cinco veces entre las escapulas en la espalda. Si no reacciona hay que voltear al bebé y dejarlo boca arriba y se hacen compresiones entre el espacio donde finalizan las costillas. Hay que observar si hay algún tipo de objeto extraño en la boca o pasando por el canal hacia la tráquea. Si los niños son mas grandes lo recomendado es hacer compresiones abdominales con ambos brazos haciendo presión sobre su estomago.
Con respecto al botiquín, hay que tenerlo siempre en un lugar accesible o identificado por otros pero que no sean los niños quienes tengan alcance a este, además de protegerlo del calor o de la humedad. Hay que evitar que este en la cocina o en el baño y hay que estar pendiente de reponer los productos que ya se hayan acabado. Lo básico que debe haber son guantes, toalla de alcohol, vendas, suero, antiséptico de yodo para las heridas, gasas, esparadrapo, curas y tijeras.