Es tradición siempre dar regalos a los niños cuando las fiestas navideñas se acercan, pero muchas veces los padres no cuentan con el presupuesto adecuado para dar a sus hijos lo que quieren, si atraviesas por esta situación, no te preocupes aquí tienes algunos consejos que te servirán de mucho 
La temporada navideña se acerca rápidamente. Si bien es un tiempo maravilloso del año, muchos padres se encuentran llenos de estrés, ansiedad, la presión o la culpa sobre todo si sus finanzas están apretadas y los niños no se la ponen fácil, ya que constantemente recitan la lista de juegos, juguetes y aparatos electrónicos que estarán esperando.
Si no tienes el dinero para comprar un montón de regalos o celebrar las fiestas de la manera que deseas, entonces lo mejor es ser honesto contigo mismo y tus hijos. Comprar lo que puedes pagar y sólo usar la tarjeta de crédito para comprar los regalos si puedes pagar la deuda en dos o tres meses.
Las vacaciones son realmente acerca de pasar tiempo con tu familia y amigos, para ser agradecidos, lo que refleja el esfuerzo que hiciste durante todo el año y para pensar en cosas que te gustaría cambiar en Año Nuevo.
Por lo tanto, antes de que la navidad termine, ten en cuenta estos consejos para navegar por tus finanzas durante las vacaciones:
1. Manejar las expectativas: muchas veces, las expectativas de los niños para los regalos de navidad se obtienen de amigos, compañeros de clase o de la televisión. Pero, hay que ser realistas, dile tus hijos la situación financiera y dales un límite de precio para los regalos de navidad. Si sólo se puede obtener un gran regalo o un solo juguete, es mejor decírselos lo más pronto posible, para que no se hagan una idea errada. Si tus hijos todavía creen en Santa, compra varios regalos pequeños que no sean costosos, esto ayudará a que tus sus hijos entiendan que la recepción de regalos no significa una experiencia de vacaciones mejor, pasar tiempo con sus seres queridos es lo más importante.
2. Crea un presupuesto: establecer un límite de gasto para tus compras navideñas que incluya comestibles, regalos, entre otras. Esto reducirá las posibilidades de entrar en la deuda y aliviar el estrés de tener que comprar cosas que no están en el presupuesto. No vayas a la deuda tratando de comprar regalos para tus hijos, piensa ¿realmente necesitamos un nuevo ordenador de sobremesa o portátil, o pueden utilizar la que tienen hasta el próximo año?
3. Sé fuerte: no caigas en los ojos de cachorro, lloriqueos o quejas de tus hijos. Mantente firme en tu decisión acerca de los regalos para las fiestas. Cede a tus hijos juegos de expectativas poco realistas y no a prepararse para las decepciones que se producen en el mundo real.
4. Prepárate para los regalos inesperados: si tus hijos deciden dar los regalos a su niñera, maestros o amigos, no se alarme. Deja que tu hijo te ayude a hornear galletas o hacer regalos hechos a mano para esas personas.
5. Si tienes un ex-cónyuge, consulte con él o ella: asegúrate que tus hijos no están pidiendo los mismos dones y no utiliza la culpa como una manera de conseguir más de ambos padres.
6. Seguir las tradiciones: continúa o inicia las tradiciones económicas de la familia, tales como cocinar u hornear regalos especiales juntos o pasar por el barrio de villancicos. Otra idea es que tu hijo reúna juguetes ligeramente usados para donar. Esto lo ayudará a mantener el espíritu de las fiestas y dejará de pensar en todos los regalos que quiere para las fiestas.
7. Voluntarios: considera la posibilidad de dejar que los niños mayores sean voluntarios para ayudar a los niños enfermos o personas sin hogar. No sólo van a aprender el significado de la compasión, sino que también ayudarán a cambiar su perspectiva sobre la vida y lo que es realmente importante, como por ejemplo, que otros niños y familias tienen menos que ellos. Explícales que deben ser agradecidos por lo que tienen.
