Un bebé puede padecer de diversos malestares en sus primeros meses de vida y como la manera mas rápida de expresarse que tienen es el llanto, sus padres a veces caen en el desespero de no poder identificar que es lo que les duele o les molesta. Por eso es importante aprender a identificar si tienen gases, cólicos u otro malestar. Siempre ha sido una de las más grandes dudas de los padres que tienen un bebe recién nacido, porque ante el llanto de sus pequeños, no saben como actuar, y si realmente son gases lo que los tienen incómodos o si tal vez, puede llegar a ser otro problema de salud.
Es común que todos los bebes presenten este síntoma durante sus primero meses y es necesario ponerlos contra el pecho y darle pequeños golpecitos en la espalda, o es lo que se hace para expulsarlos rápidamente. Lo que ocurre para que se produzca esta acumulación, es que cuando lloran o succionan pecho o tetero, se llenan de aire. Así que, por ejemplo, en la hora de la alimentación, es cuando mas aire puede alojarse en sus cuerpos, específicamente en el estomago. La duración de este proceso dura casi hasta los dos meses, y es completamente normal, que durante la expulsión de gases, vomite un poco de leche.
Para poder lograr distinguir entre un cólico y un gas o incluso un reflujo, hay que saber que, el cólico aparece cerca a las dos semanas de nacido y llega a quedarse en su cuerpo produciendo síntomas hasta los casi 4 mese de edad. Por lo general, el efecto de este tipo de malestares se produce en las horas de la tarde o en la madrugada, y el llanto es sumamente alto, precisamente por el dolor que se produce.
En el caso del reflujo, se puede identificar porque se presenta un dolor o un llanto excesivo durante las horas de alimentación o después de ellas, además los bebés suelen vomitarse, sentir agrieras y para los bebes que sufren los casos más graves, pueden dejar de respirar por algunos minutos mientras están comiendo, así que las madres deben estar muy atentas. Si los bebes presentan apnea, es mejor recurrir de inmediato a un pediatra, para que inicie los estudios y tratamientos necesarios, porque en medio de estos episodios, puede llegar a perder la vida.