Los niños de forma natural aprenden a partir de las experiencias y consejos que les brindan los padres. Esto da por consecuencia que cualquier buen hábito que se les enseñe de la forma adecuada a los niños, será aceptado e incorporado. Por eso, a continuación, se explica como enseñarle correctamente a pensar a los hijos. 1. Aumentar el vocabulario
Es importante enriquecer el vocabulario de los hijos, lo cual se puede lograr fomentando el diálogo con los adultos. El ejercicio mental de razonar, aprender y defender una idea propia en una conversación, ayuda a los niños a tomar decisiones propias y coherentes en el futuro. Mientras mejor sea el lenguaje y la capacidad de razonamiento de los hijos, mejor va a ser la capacidad para que se expresen.
2. Fomentar el aprendizaje en los errores
Siempre que se desee enseñar a pensar a los hijos, se debe tener en cuenta el descubrimiento de los errores. Se debe trasmitir el mensaje de que equivocarse es humano y de que siempre se aprende algo nuevo de los errores. El hecho de enseñarles a convivir con los errores tampoco significa alfombrarles el suelo para cuando se caigan. Por el contrario hay que preparar a los niños para que cuando tropiecen puedan contar con la capacidad de levantarse y rearmarse nuevamente.
3. Motivar a los hijos a pensar
Más que enseñarles a pensar, la función de los padres debe ser motivar a los hijos para que ellos deseen pensar por cuenta propia. Para lograr eso es necesario darles la posibilidad de resolver sus propios problemas, obviamente acordes a la edad del pequeño. La clave está en escucharlos y guiarlos hacia la respuesta, pero dejando que ellos mismos la puedan encontrar. Este consejo es muy importante, ya que el hecho de pensar por si mismo y poder resolver sus problemas aumenta considerablemente la autoestima y confianza en ellos mismo.
4. Enseñar a tomar decisiones
La capacidad de razonamiento y la inteligencia son las encargadas de resolver los problemas vitales. Por esos no es inteligente un niño capaz de descubrir una fórmula física, si en su vida cotidiana no es capaz de tomar una decisión que requiera del sentido común. Si se entiende que educar es esencialmente fomentar la libertad utilizándola con responsabilidad; entonces aprender, es tomar las decisiones correctas a partir de las experiencias vividas y los consejos recibidos. Se debe enseñar a los niños a ejercer la libertad usando la herramienta del pensamiento, lo cual debe ser trasmitido desde que son pequeños, con pequeñas decisiones.
5. Fomentar momentos de reflexión
Es importante que los niños aprendan a reflexionar acerca de la realidad y el mundo que los rodea. Haciéndoles preguntas a los hijos acerca de como se sienten, que hicieron en la escuela o en el jardín, se los puede incentivar a pensar sobre las nuevas experiencias vividas. De esta manera podrán aprender y aprovechar de forma beneficiosa cada situación que se presente. También es importante fomentar la creatividad y la imaginación, esto se puede lograr mediante la introducción de los hijos al mundo del arte y las manualidades.
6. Controlar el uso de la televisión y promover la lectura
La televisión puede ser educativa e instructiva si se le da un uso controlado, sin embargo no estimula la imaginación de los niños. En cambio los libros siguen siendo una herramienta eficaz del pensamiento, donde los niños además de aprender, se sumergen en el mundo de la imaginación.